21 decretos sanadores para sanar la humillación
Cuando nos sentimos humillados reaccionamos de formas muy diversas.
Hay personas que se enfrentan con coraje y valentía frente a sus agresores y no se achantan a la hora de defenderse. Otras, en cambio, se refugian en sí mismas y se aíslan para protegerse de semejante maltrato.
En muchas ocasiones estas situaciones generan una herida profunda desde la cual, posteriormente, reaccionamos cuando nos sentimos violentados o humillados.
Si has vivido situaciones de humillación es posible que hayas vivido de una manera intensa desde la rabia y la impotencia más intensas hasta la tristeza por esa sensación de rechazo que se queda contigo.
El hecho de por qué recibes ese ataque de humillación tal vez sea lo de menos; el ataque a los demás está tristemente difundido y en la sociedad que vivimos cualquier excusa es buena para tratar de hundir al otro.
Para poner mi granito de arena en el proceso de sanación de las personas que han vivido esta situación he preparado una meditación para sanar la humillación y los efectos negativos que a nivel emocional quedan.
Espero que te sea de mucha ayuda y que salgas hacia adelante paso a paso. La tienes un poco más abajo, dentro de esta misma publicación.
¿Cómo prepararme para esta meditación?
Puedes realizar esta meditación de forma puntual aunque te recomiendo trabajarla durante 21 días seguidos. No te preocupes, solamente dura unos 20 minutos.
Encuentra el momento idóneo para meditar ya que necesitarás estar concentrado para repetir una serie de decretos para grabar a fuego en tu inconsciente.
Para ello, al empezar la meditación estate seguro de permanecer unos minutos en silencio para conectar con tu respiración y con el latido de tu corazón.
Inspira y suspira varias veces hasta que te sientas tranquilo.
A medida que la meditación avance deberás repetir de manera calmada los 21 decretos sanadores que, al interiorizarlos a medida que vayan pasando los días, te facilitarán la reprogramación de las creencias limitantes que le dan fuerza a tu herida de humillación.
Si necesitas hacer la meditación varias veces al día o repetirte estas frases más veces fuera de la meditación, hazlo sin problema. Sigue tu instinto.
También te recomiendo que, ya que la humillación viene conectada con la herida del rechazo puedas continuar posteriormente, al terminar los 21 días, con esa otra meditación.
Si quieres profundizar aún más en este ejercicio de sanar la herida de humillación te animo a que observes qué otras situaciones has vivido que te han llevado ahí.
Desde este análisis observarás patrones limitantes y creencias que has programado en tu inconsciente y que te llevan a revivir esas situaciones.
Al final, lo que cuenta es que puedas vivir conectado con la paz de tu corazón.
Por ello, te animo a que diseñes tu propio plan de trabajo y que vayas hacia adelante en tu proceso de sanación para tener una vida plena.
Si te interesa seguir sanando tus heridas, te recomiendo que le eches un vistazo al resto de meditaciones de mi canal de Youtube, ordenadas según temática.